es

Así se hace un reloj de sol de piedra, paso a paso

Nuestros antepasados descubrieron cómo medir el tiempo tomando el sol como elemento de referencia. De este modo, inventaron los relojes de sol, objetos claves en la historia de la humanidad que todavía triunfan en jardines y fincas. Los relojes de sol de piedra son productos muy solicitados a los escultores, pero su proceso de elaboración es complejo y requiere de gran destreza. Te lo contamos paso a paso y presentamos la mejor opción para comprar un ejemplar.

Breve historia de los relojes: del uso del sol a los modelos mecánicos

El reloj de sol, la primera gran invención del hombre para medir el tiempo, fue un pilar importante en la estructuración de las rutinas humanas. Los primeros ejemplares datan de la antigua Babilonia, hace unos 3.500 años, y fue la civilización egipcia la encargada de crear su primera gran evolución.  Gracias sus modelos de reloje de sol, el día fue dividido en 10 partes, con marcas alrededor de la base de los obeliscos representando las subdivisiones temporales del día. Sin embargo, el reloj de sol portátil más antiguo del mundo y construido alrededor del 1500 a.C., incorporó dos divisiones adicionales correspondientes al amanecer y al ocaso, dividiendo así el día en 12 partes.

La historia del reloj de sol no se detuvo en Egipto, ya que la Antigua Grecia y la civilización árabe recogieron el testigo. En el año 280 a.C., el astrónomo griego Aristarco de Samos inventó el reloj de sol hemisférico, que representaba una variación significativa del modelo egipcio y que llegó a ser usado en el mundo árabe hasta el siglo X. En la época medieval, los árabes hicieron un uso extensivo de su conocimiento en trigonometría para diseñar relojes de sol con un gnomon paralelo al eje de la Tierra.

Reloj de sol de piedra.
Reloj de sol de piedra.

El Imperio Romano también aportó su cuota de innovación a la evolución del reloj de sol, brillando en la creación de dos tipos de relojes: los relojes de sol para jardín, comúnmente solicitados hoy en día para decorar grandes jardines, y los relojes de sol portátiles. Un ejemplo de este último tipo se puede encontrar en el Museo de Historia de la Ciencia de Oxford, una pieza que demuestra la impresionante habilidad romana para adaptar la tecnología a diferentes latitudes y épocas del año.

Los relojes de sol fueron de uso común hasta el siglo XIX, a pesar de la aparición de los primeros relojes mecánicos en el siglo XIV. Sin embargo, la invención del telégrafo eléctrico por parte de Samuel Morse en 1832 marcó el inicio del fin para los relojes de sol, ya que permitía transmitir una señal de tiempo a nivel nacional e incluso global, facilitando la configuración de los relojes mecánicos Eso sí, los relojes de sol todavía se utilizan en algunas zonas rurales de Egipto.

Cómo funciona un reloj de sol

El reloj de sol es uno de los instrumentos más antiguos para medir el tiempo, y se basa en la sombra que un objeto vertical, conocido como gnomon, proyecta sobre una superficie a medida que el sol se mueve por el cielo. El funcionamiento es simple: la variación en la longitud de la sombra proyectada en un plano determina la hora del día.

El concepto básico de un reloj de sol es un palo vertical que se eleva desde una superficie horizontal plana. A medida que el sol sale, pasa por su punto más alto y se pone, la sombra gira alrededor del palo en la dirección de las agujas del reloj, y su posición puede utilizarse para medir el tiempo, tal y como explica el científico de la NASA David P. Stern.

No obstante, para que un reloj de sol funcione correctamente, es fundamental que esté orientado de manera adecuada y que su posición se haya calculado teniendo en cuenta la latitud del lugar. Además, existe un desfase entre la hora solar y la hora legal. Por tanto, con el fin de saber la hora oficial, en invierno será necesario sumar una hora, y en verano dos. 

Cabe destacar que el reloj de sol, a pesar de ser rudimentario en su diseño, permitió importantes avances en la historia de la humanidad. En este sentido, logró dividir el día en horas, calcular distancias entre puntos, determinar los solsticios y equinoccios y las estaciones del año. En definitiva, fue el primer gran invento de la historia de la humanidad para medir el tiempo. 

Cómo hacer un reloj de sol de piedra

El meticuloso proceso de elaboración de un reloj de sol de piedra preserva en la actualidad los pasos y herramientas de antaño. A lo largo de cinco fases clave, los escultores transforman una simple piedra en una pieza de arte funcional, capaz de medir el tiempo con la simple ayuda del sol:

1. Elección de la ubicación: la primera etapa se basa en la elección de un lugar adecuado, un aspecto clave en el que se debe conseguir una ubicación en la que dé directamente el sol, así como una orientación del reloj hacia el sur. Una vez elegida la ubicación se realiza un primer boceto de la obra en papel, donde se comienzan a definir las proporciones del reloj.

2. Boceto del reloj en papel: los maestros canteros deben dominar también el arte del dibujo, además de la talla en piedra. En cada obra que realizan, incluido un reloj de sol de piedra, uno de los pasos fundamentales es hacer un boceto en papel. Gracias a la plasmación del diseño en papel se consiguen definir las proporciones de la obra escultórica. 

3. Diseño en arcilla o con plantillas a escala: el diseño, tercera fase del proceso, puede variar dependiendo de la complejidad del reloj. Algunos artesanos modelan un prototipo en arcilla, mientras que otros prefieren crear plantillas a escala para su elaboración en piedra.

4. Labra: la parte más compleja del proceso. Es el momento en el que el maestro cantero lleva a cabo el tallado en piedra. En este punto se puede optar por dos opciones. La primera es la de seguir la técnica de la talla directa, guiándose por el boceto mediante plantillas. La segunda consiste en utilizar un transportador de puntos para llevar a la piedra el modelo moldeado con anterioridad. 

5. Cómo colocar un reloj de sol de piedra: la última fase es la que se corresponde con el anclaje del reloj de sol. Dependiendo de su lugar de ubicación se le insertan anclajes en una u otra parte de su estructura. Tal y como señalamos con anterioridad, su emplazamiento debe permitir la llegada de luz solar y estar orientado hacia el sur. 

Venta de relojes de sol de piedra

En el corazón de Galicia, la antigua tradición de la talla en piedra cobra vida a través de la meticulosa y habilidosa labor de Rodrigo García Xiráldez, reconocido maestro cantero y escultor que ha dedicado más de una década de su vida a la creación de relojes de sol en piedra.

Rodrigo tiene la certificación de Artesanía de Galicia y de la Red Nacional de Maestros de la Construcción Tradicional, sellos que validan su habilidad y experiencia en el campo. Por ello, es la opción más fiable a la hora de comprar un reloj de este tipo. Su taller PEDRA Stone Design Projects está especializado en la venta de relojes de sol de piedra. 

La adquisición de uno de estos ejemplares es un proceso que va más allá de una simple transacción comercial. Cada reloj se talla y se diseña a mano, asegurando que cada pieza sea única. Una vez completada la escultura, se realiza un envío cuidadoso al domicilio o lugar requerido por el cliente. En un esfuerzo por garantizar la completa satisfacción del cliente. 

Puedes ponerte en contacto con él por teléfono, WhatsApp o email en este enlace. La primera consulta y la presupuestación del proyecto son gratuitas. 

Rodrigo G. Xiráldez

¡Hola! Me llamo Rodrigo y soy un maestro cantero especializado en la escultura en piedra. Desde 2015, elaboro desde cero esculturas exclusivas por encargo en mi taller PEDRA Stone Design Projects. A día de hoy, cientos de clientes españoles e internacionales (realizo envíos al extranjero) ya han confiado en mis servicios para crear sus esculturas personalizadas (valoración de 5 estrellas en Google). ¿Quieres una escultura en piedra? No dudes en contactarme. Cruceiros, esculturas de jardín, bustos, escudos heráldicos, relojes de sol, estatuas religiosas, mesas, bancos, chimeneas… ¡Descubre en este enlace todo lo que puedo hacer por ti! Ver más artículos

Author avatar

Rodrigo G. Xiráldez

¡Hola! Me llamo Rodrigo y soy un maestro cantero especializado en la escultura en piedra. Desde 2015, elaboro desde cero esculturas exclusivas por encargo en mi taller PEDRA Stone Design Projects. A día de hoy, cientos de clientes españoles e internacionales (realizo envíos al extranjero) ya han confiado en mis servicios para crear sus esculturas personalizadas (valoración de 5 estrellas en Google). ¿Quieres una escultura en piedra? No dudes en contactarme. Cruceiros, esculturas de jardín, bustos, escudos heráldicos, relojes de sol, estatuas religiosas, mesas, bancos, chimeneas… ¡Descubre en este enlace todo lo que puedo hacer por ti! Ver más artículos

Related posts