El primer gran dispositivo para medir el tiempo sigue estando de actualidad. El reloj de sol de piedra es una pieza muy codiciada, sobre todo en jardines y patios, pero, ¿dónde comprar uno de calidad y personalizado?
| Índice de contenidos |
|---|
| Qué es un reloj de sol |
| Cómo se hace un reloj de este tipo |
| Cómo comprar un reloj de sol de piedra |
Qué es un reloj de sol
En la actualidad es muy sencillo saber qué hora es. Los relojes, los móviles, los ordenadores y las pulseras inteligentes, entre otros dispositivos, nos permiten consultar el horario y medir el tiempo en cualquier momento. No obstante, no siempre fue tan fácil a lo largo de la historia de la humanidad.
El reloj de sol fue el primer gran invento de los humanos para medir el tiempo. Sus creadores fueron personas pertenecientes a una de las civilizaciones más importantes de la historia: el antiguo Egipto. Hace 3.500 años, los egipcios construyeron sus primeros relojes de este estilo, consiguiendo dividir sus días en 10 franjas de tiempo.
Los primeros ejemplares se hicieron a gran escala y seguramente todo el mundo los conoce, aunque desconocían hasta la fecha su verdadera función. Nos referimos a los obeliscos, esas grandes estructuras de piedra verticales con ejemplares en diferentes partes del mundo. Los egipcios añadieron las marcas representantes de las franjas horarias en la base. La sombra proyectada por el obelisco en esa zona a medida que se movía el sol servía de guía del día.
Este fue el prototipo de los relojes de sol, que pronto evolucionaron hasta convertirse en portátiles. De hecho, el primer reloj de sol transportable del que se tiene conocimiento se construyó en Egipto alrededor del año 1.500 a. C. En este dispositivo, las franjas de tiempo ascendían a 12, añadiendo dos más al primer modelo para hacer referencia al amanecer y al ocaso.
Cómo funciona
La versión del obelisco ya anticipó el funcionamiento de este tipo de dispositivos. Un reloj de sol está construido de tal forma que tiene un objeto saliente que proyecta la sombra sobre una superficie inferior. Este objeto recibe el nombre de gnomon o varilla, el cual se sitúa perpendicularmente a la superficie mencionada.
Esta última se divide en franjas horarias y es muy simple saber la hora que es: basta con ver qué espacio cubre la sombra proyectada. Esta se mueve al mismo tiempo que el sol, por lo que es indispensable que haga sol para que un reloj de este tipo funcione y sea fiable.
Tipos de relojes de sol
Los dos relojes de sol más habituales difieren en el plano en el que proyectan la sombra. De este modo, diferenciamos entre relojes de sol horizontales y verticales.
El más típico es el vertical. Sus versiones en piedra son muy demandadas por los amantes de las esculturas y en PEDRA Stone Design Projects somos expertos en su elaboración.
El reloj de sol vertical en piedra se caracteriza por ubicar su gnomon de forma perpendicular a la superficie plana. Si se ubica en España, es decir, en el hemisferio norte, las horas de la mañana hasta las 12:00 h se indican a la izquierda del reloj. Por su parte, las de la tarde se marcan cuando la sombra se proyecta a la derecha.
Asimismo, es común entre los relojes de sol verticales formar parte de una estatua o tener en la parte superior una cabeza humana. En estos casos también reciben la denominación de relojes antropomórficos.
Proceso de elaboración
El proceso de elaboración de un reloj de sol de piedra tiene cuatro pasos:
- Localización: elegir una ubicación óptima es fundamental para el buen funcionamiento del reloj de sol. La orientación del lugar elegido debe ser hacia el sur y siempre tiene que darle el sol. A continuación se realiza un primer boceto del reloj en papel. Este paso es clave para comenzar a definir sus proporciones.
- Elaboración del diseño: en este punto existen dos opciones, bien modelar el reloj en arcilla, bien elaborar plantillas a escala para su posterior traslado a la piedra. La elección de una u otra depende de la complejidad del proyecto.
- Talla en piedra: se talla el reloj en un bloque de piedra de calidad. En función del tipo de obra, se puede optar por la técnica de la talla directa siguiendo el boceto mediante plantillas, o utilizar un transportador de puntos para copiar el modelo previamente generado.
- Anclaje: los anclajes son las piezas indispensables para fijar el reloj en su ubicación final. En esta última fase se procede a la inserción de los mismos.
Cómo comprar un reloj de sol en piedra
Únicamente un maestro cantero o escultor de prestigio está capacitado para construir un reloj de sol de piedra. Por ello, el lugar adecuado para comprar un ejemplar es un taller de escultura reconocido por Artesanía de Galicia y la Red de Maestros de la Construcción Tradicional. Son piezas muy detalladas, por lo que el precio se establece previamente con el escultor.
La consulta en el taller PEDRA dirigido por Rodrigo G. Xiráldez en la que tiene lugar la presentación de la idea por parte del cliente es gratis. Asimismo, en esta primera toma de contacto se fija el precio y el período de elaboración del reloj.
Tal y como acreditan las reseñas de nuestros clientes, los resultados son exclusivos y de gran calidad. Por lo tanto, si has llegado hasta aquí y quieres comprar un reloj de sol de piedra, tan solo tienes que ponerte en contacto con Rodrigo. Estas son las opciones:
- Llamada: 627 190 145
- WhatsApp: 627 190 145
- Email: [email protected]
